El Congreso
En 2023, María Dolores Flores Ruiz -Lola Flores- habría cumplido cien años. Un siglo después de su nacimiento, 29 años desde su adiós de los escenarios de la vida, sigue firmemente cosida al imaginario colectivo, que recuerda su genialidad, repite sus sentencias cargadas de sal y pimienta y se resiste a desgranar por el terraplén del olvido la imagen de una artista que supo labrarse una carrera sin paragón hasta convertirse en un icono de la cultura española más allá incluso de nuestras fronteras.
Ha sido mucho lo que se ha dicho y escrito de ella. Había de dónde tirar. Una vida plena e intensa, una carrera profesional principiada cuando era aún una niña y subió con apenas 16 años al imponente escenario del Teatro Villamarta de su jerez natal, pero que luego se ramificó intensamente en los múltiples haces de luz de una artista provista de una sagacidad y una inteligencia descomunal, poliédrica y versátil, que protagonizó más de 40 películas y fue incluso más fuerte que el estereotipo.
Volver la vista atrás para escudriñar en la vida y obra de Lola Flores es hacer un recorrido visual, conceptual y factual por el último siglo de la historia de España, con sus luces y sus sombras, con sus tropiezos y progresos, con sus vaivenes políticos, problemas sociales y transformación irreversible hacia la modernidad, que ella mismo protagonizó desde su primigenia versión folclórica a la que, paradójicamente, ayudó a consolidar y superar al mismo tiempo.
Lola hizo a Jerez todavía más una ciudad sin fronteras y la UCA la convirtió en ciudad universitaria. Tendríamos, sin duda, una deuda pendiente con la ciudad y con el significado de Lola para la cultura española si mirásemos para otro lado y no encauzáramos con responsabilidad voluntades, compromisos y recursos en la articulación de un punto de encuentro de expertos y estudiosos en su vida y obra con la sociedad a través de presentación de trabajos de investigación, junto a testimonios de personas que convivieron con ella en su condición de testigos privilegiados de unos momentos y unas historias, que ya son de otro tiempo y que revivificamos gracias a la elocuencia de estas fuentes primarias.
Las conferencias y comunicaciones de este Congreso tienen la elástica plasticidad de una artista que supo construirse y reconstruirse, que fue folclórica, tonadillera, flamenca, yeyé, tradicional, moderna, jerezana, internacional, actriz, cantante, bailaora, pintora, declamadora y mil cosas a la vez. Un icono de la escena andaluza en la gran pantalla y un anticipo de rapera con sus irreproducibles trabalenguas de vértigo.
Todo lo que queda por decir y por contar sobre Lola queremos que forme parte de este Congreso que se desarrollará entre los días 9 y 11 de noviembre de 2023 en el Auditorio Cajasol de Jerez. Una actividad académica abierta a la comunidad universitaria (con reconocimiento de créditos académicos y convocatoria para la presentación de comunicaciones) y a la sociedad en general. Una iniciativa que hubiese permanecido aletargada en el espacio inhóspito de las ideas fútiles sin la colaboración y el apoyo de las instituciones y entidades culturales que han arropado a la Universidad de Cádiz en este empeño: Ayuntamiento de Cádiz, Diputación de Cádiz, Junta de Andalucía, Fundación Cajasol, Bodegas Williams & Humbert, Cátedra de Flamencología de Jerez o Academia San Dionisio, entre otros. Gracias a todos y, sobre todo, gracias a Lola por existir, que lo sigue haciendo.